martes, 3 de noviembre de 2009

Mi Andy Warhol neuquino.

Para los que no lo sabían, convivo con un artista de la fotografía.
Maneja todo tipo de efectos sobre las imágenes y las hace únicas.
Algunos no lo entienden y le dicen: "Ah, sí. Yo ví esa foto cuando estaba bien."
Ups... Bue... Todos los grandes genios del arte han sido incomprendidos en algún momento de su vida.
Miren y disfruten:












viernes, 18 de septiembre de 2009

Fotos.



Mi Gigante





martes, 1 de septiembre de 2009

Una leyenda que no se extingue.


Ya estoy cerca y lo incomodo con una vara. No pude evitar acercarme…
El calor que desprende avanza hasta lejos de su centro furioso.
Lenguas irrepetibles en color, movimiento y altura.
Todo se vuelve sumiso cuando lo alcanza. Y todo sucumbe.
Laten las brasas. El viento, de pronto, les respira encima y en cada interior que arde se dibuja la forma de lo que hasta hace poco fue. Como pasó en los cuerpos de aquellas brujas perseguidas, o en los muros de tantas ciudades incendiadas, o en los libros que algunos creyeron inoportuno dejar a la mano. Tal vez, el famoso y escurridizo Bairoleto, cuatrero y ladrón de estas extensiones, avivaba de la misma forma su solitaria hoguera entre estos cañadones que eran todo su dominio. Un laberinto de tierra enrojecida, que las aguas convirtieron en tantos caminos delgadísimos y encajonados que la vista desde el cielo hizo que se llamara “Las Cárceles”.
Estas celdas intrincadas lo ocultaron, pero no lo suficiente.
Una noche eligió dispararse primero antes de ser apresado.
Sin embargo, con el misterio contra el que la muerte no puede ni podrá nunca, ese hombre sigue siendo soberano de estos calabozos de piedra y arena.

Sil.



martes, 30 de junio de 2009

La foto de tu vuelo.


Jamás va a borrarse de mi mente la imagen que mis ojos grabaron de ese instante.
El viento la tomaba, la envolvía en sus mil brazos y la llevaba.
Claudio abría sus brazos en un saludo que me hizo recordar al de un niño, cuando se da vuelta en la puerta de la escuela, para despedir a esa mamá que sabe, volverá.
Para lograr ese impulso que la liberara, Adriana necesitó acercarse a sus hermanos.
“Acompañame…” pidió a uno de ellos con lágrimas. Se oía suave, como un ruego apagado, pero lleno de tristeza y hasta algo de miedo.
Sergio no tardó en abrazarla amorosamente y así, bien juntos, animarse a las olas frías, a la arena que no paraba de cambiar de formas y al aire de aquella playa, que pareciera que nos conoce y ya la estaba esperando.
Y ahí sucedió esa imagen de la que hablo. Tomó el recipiente entre sus manos y dio un salto. Estilizado, amplio. Parecía una bailarina de un ballet trágico.
Ya está. Ya estaba en todos lados. Agua, cielo, médanos. Es todo tuyo y en la mayor paz. En nosotros también estás. Sin lápidas que medien, sin flores arrugadas, que nada dicen del amor de alguien que pasó por este mundo y dejó su marca.
Esos son tus hijos. Gente buena y orgullosa de los padres que les hicieron conocer la vida.
Esos son tus hermosos nietos.
Los ves desde arriba, mientras te hacés dueña de la altura.
Así te despiden. Lo hacen sólo de ese cuerpo que tanto te costó el último tiempo. Porque se quedan acá tu historia, tus cuidados, tus rabietas y el amor, que no conoce a la muerte cara a cara.

Sil.
29/06/09

Nota: La Negrita, mamá de Sergio. Murió el 23/06/09 a las 10 a.m.

miércoles, 3 de junio de 2009

Lunes 5 de junio de 2006


El viernes, hace 3 años que llegó tu ausencia.
A las 19 hs. de un penoso lunes.
Pero la sensación de tu mano aferrada con fuerza a la mía (que jamás se borra de la memoria de mi piel) y la certeza de que estás cerca, le dan batalla cada día.




domingo, 24 de mayo de 2009

El viento trae otra crónica.

El viento castiga, otra vez, esta ciudad en medio de un desierto. La gente lo odia.
Las bardas rojizas que rodean Neuquén se deshacen y se montan sobre él volviendo el aire denso y difícil de respirar. No sirven de nada las pestañas. Duelen los ojos repletos de mugre. Y no es raro meter en algún pozo el pie distraído, por la atención puesta en las manos para que tapen algo de los peligros que traen las calles casi intransitables, tomadas por remolinos rojos.
A pesar de semejante panorama, calzo en el hombro el bolso que me regaló el gaucho para mi nuevo trabajo (feliz por alentarme tanto y verme aceptar el cargo, con miedo pero decidida) y me lanzo contra esta brisa descarriada.
Dejo la sala ordenada, a oscuras. En el parque quedó solitario el pobre espantapájaros que cuida la huerta que intentamos ver crecer. Podrá mantenerse en su estaca…?
Pensar que la última vez que había intentado ser maestra, me había tenido que ir pidiendo mil perdones a la comprensiva directora. No podía. No estaba preparada aún para lo que hoy disfruto tanto.
Ahora puedo concentrarme en la observación de cada uno de los chicos, en la búsqueda de las mejores didácticas, en la autocrítica como maestra y el esfuerzo por aplicar los cambios que sean necesarios. Hoy puedo responder al vínculo tan cercano que se genera en el jardín con los niños.

El vacío se pone cada vez más jugoso en el horno. Se nota por el aroma que inunda todo. Y el viento que no se cansa de atacar.
El gaucho puteará contra él de lo lindo cuando sea la hora de volver a casa. “Este viento culeao!”, lo enfrenta. Pero las ráfagas como látigos lo harán acobardarse pronto y buscar protección en la Morocha, que lo traerá hasta la puerta, como buena yegua sabedora del camino.

Sil.

martes, 5 de mayo de 2009

Sólo fotos.

Nos encantan las fotos y las compartimos con ustedes...















lunes, 30 de marzo de 2009

Nuevo desafío: Pasos a Chile.


Los gauchos del Grupo Huinca se han impuesto una nueva meta guiados por la curiosidad inagotable de Sergio, el as del Google satelital. Tras horas de ver nuestra tierra a través de las imágenes que llegan desde el espacio, descubrió, asombrado, que existen más de 150 pasos (de difícil acceso la mayoría, claro) que unen nuestra Argentina con Chile, país hermano.
La "lamparita" se encendió inmediatamente y el nuevo proyecto surgió. Y hasta que la Bandera Argentina del grupo no acompañe los ánimos del viento en todos esos puntos, sus yeguas rodantes no descansarán.
Las chinas? Esta vez los esperamos ansiosas de sus anécdotas y sus caras felices.


La Payunia





Pozo de las Ánimas


Hito ubicado en el Planchón Vergara

lunes, 19 de enero de 2009

Domingo de río.

Uno de los brazos del Limay corre frente a mí.
Digo corre porque puede verse en la superficie la fuerza de este agua clara, verde esmeralda en combinación con el sol que golpea la mañana.
Clavo la vista ahí, en un delimitado sector del río. En esas ondas que no paran, no terminan. Son contínuas. Más. Siguen pasando. Nunca culminan su recorrido. Es misterioso... no?
El sonido que me envuelve esta compuesto de la brisa entre los árboles que bordean lo extenso de las costas, las charlas de algunos pájaros, el suave deslizamiento del agua sobre su fondo de piedras redondas y coloridas.
Focalizo mi visión aún más en el punto que me concentra e imagino: me incorporo, me desvisto por completo y me adentro en esa masa fresca que me va cubriendo de a poco.
Al llegar a la mitad del río me detengo, extiendo mis brazos, como queriendo abarcar ambas orillas y en cámara lenta me dejo caer hasta quedar mirando el cielo impecable. Y me voy con el río, que ahora me muestra su verdadera voz, la que está dentro de él. Potente, furiosa, milenaria. Floto. Mi mente también flota y en ella recuerdos y pensamientos.
Es un estado maravilloso. Ojalá pudiera traer a otros conmigo. Seríamos como un cardumen silencioso y flotador en un viaje sin trayecto. El azar de las corrientes nos llevaría, vaya uno a saber a qué destino.
Sil.

miércoles, 14 de enero de 2009

Más fotos de la vida por acá.




Que tengan un gran año.